Redacción
Chilpancingo, 04 de agosto (PlanB).- Las nueve presas de Guerrero incrementaron sus niveles de captación de agua por las lluvias registradas en julio; de acuerdo con el gobierno del estado algunas están por encima de 100 por ciento de su capacidad, pero no representan riego por el desfogue que se lleva a cabo.
Mediante un boletín se informó que tras el periodo de sequía, la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda, ha instruido el monitoreo constante, que se lleva a cabo en coordinación con la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Se detalló que la presa La Calera, de Zirándaro, está al 132 por ciento de su capacidad, y El Gallo, de Cutzamala, al 104 por ciento “sin riesgo de desbordamiento por el desfogue que se realiza”.
La presa Palos de Altos Arcelia está al 96 por ciento; Revolución Mexicana, de Ayutla, al 82 por ciento; la Laguna de Tuxpan al 76 por ciento; El Caracol de Heliodoro Castillo al 75 por ciento; Tepecoacuilco al 74 por ciento; Infiernillo, de Coahuayutla, al 66 por ciento, y Las Garzas de Ajuchitlán al 8 por ciento.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural destacó que la lluvia juega un papel crucial en la recarga de los cuerpos de agua dulce, lo que asegura un suministro adecuado para el consumo humano y el riego eficiente de los cultivos.
“Ante la necesidad de incrementar el abasto de agua de fuentes sustentables, las presas son estratégicas, ya que permiten almacenar la lluvia, que es destinada al uso público urbano y al campo”.