Francisca Meza Carranza
Chilpancingo, 30 ene. (PlanB).- Las afectaciones por el paso del huracán Otis continuarán en Guerrero a pesar de haberse registrado en octubre de 2023, indicó la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de Guerrero (Sgirpcgro), que prevé el incremento en incendios forestales y la reactivación de laderas, entre otros fenómenos, que podrían detonarse por la erosión de la tierra.
En el curso Inestabilidad de laderas impartido el lunes por personal del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), el titular de esa Secretaría, Roberto Arroyo Matus, consideró que tanto al gobierno del estado como a la población debe preocuparles la situación de Guerrero en cuanto a laderas inestables, pues su condición natural pero se ha agravado con los daños en el subsuelo que generó el huracán y que representa un peligro latente.
Indicó que entre los “daños colaterales” que causará Otis está el incremento en incendios tras la cantidad de combustible que ocasionó, y que significa un impacto negativo, así como la erupción de las capas vegetales que también sufrieron un impacto importante y que generará más inestabilidad.
Alertó de posibles deslizamientos futuros próximos e incluso en efecto de un sismo, por lo que recalcó que es importante conocer y capacitarse por posibles daños que pudiera enfrentar la entidad.
El taller efectuado en coordinación con la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro) fue dirigido a profesionistas de la rama de la construcción, en el que personal del Cenapred explicó que se busca contribuir en la identificación de los peligros asociados a la inestabilidad de laderas, para fortalecer las capacidades técnicas de las autoridades de Protección Civil.