Redacción
Acapulco, 27 oct (Plan B).- Los pocos establecimientos que sobrevivieron al paso de Otis como huracán categoría 5 fueron saqueados por pobladores ante la incertidumbre de alimentos y productos de primera necesidad, aunado a la ausencia de seguridad de los tres órdenes de gobierno, que también permitió asaltos a vehículos que intentaban llevar víveres a damnificados, en los accesos a la ciudad.
La rapiña comenzó en las tiendas, centros comerciales y departamentales sobre la avenida costera Miguel Alemán, acción replicada en los mismos establecimientos de cada zona y colonia del municipio.
Se pudo observar a personas de todas las edades saqueando los establecimientos; hubo quien sí llevaba víveres, sin embargo también hubo quienes comenzaron la rapiña en artículos que no son de primera necesidad y saquearon tiendas de todo tipo.
Los supermercados y demás establecimientos quedaron peor que si hubiera ocurrido un terremoto; todo quedó revuelto, vacío y destruido. Se llevaron hasta el producto más pequeño, aunque no lo necesitaran.
A pesar de los cientos de efectivos de todas las corporaciones que se anuncio que llegarían al municipio, estos han priorizado la limpieza por encima de la seguridad, lo que permitió que desde la tarde del jueves grupos de hombres asaltaron los vehículos que llevaban víveres.
Se denunció que incluso hubo a quienes les fue registrado su carro.
Hay unidades habitacionales en donde los propios colonos se han organizado para la seguridad, ante el temor de que los saqueos se extiendan a las viviendas.
Apenas este viernes, tres días después de que el huracán tocara tierra en Acapulco, se observó la llegada de las primeras despensas del gobierno federal a la caseta La Venta en donde se repartieron algunas despensas a las personas que ahí esperaban; los carros que las transportan son resguardados por el Ejército Mexicano.
Este viernes también se anunció la instalación de comedores comunitarios en distintas zonas del puerto, sin embargo hasta esta tarde se había instalado el primero en el Polideportivo Cici renacimiento.
El caos generado por la incertidumbre de los acapulqueños al no saber qué pasará los próximos días continúa, ante la falta de respuesta y planificación de las autoridades.
