Bernardo Torres Morales
Chilpancingo, 11 mar (PlanB).- Luego del asesinato de un estudiante de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa a manos de Policías Estatales, el Gobierno de Guerrero colocó barricadas y muros metálicos en los alrededores de sus edificios, que comenzó el jueves pasado.
En los alrededores de la Sede del Poder Ejecutivo fueron colocados muros que trajeron de la Ciudad de México y que han sido colocadas en Palacio Nacional cuando se registran protestas de organizaciones o colectivos feministas.
La misma acción realizaron en Casa Guerrero, o residencia oficial de la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda, donde blindaron las tres puertas con las mismas vallas metálicas.
En el edificio Juan N. Álvarez y Vicente Guerrero colocaron madera en los ventanales que contienen vidrio, ante el temor de que los estudiantes realicen acciones violentas en la Ciudad de Chilpancingo.
Las actividades burocráticas han sido suspendidas en la mayoría de las dependencias a petición de el Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), en un inicio solo para adultos mayores y personas con discapacidad.
El cierre de avenidas como la René Juárez Cisneros (Encauzamiento Huacapa) ha provocado molestias en la ciudadanía quienes tienen que caminar largos trayectos o poner en riesgo su integridad física al saltar los muros metálicos.
Hasta ahora los estudiantes normalistas han rechazado el diálogo ofrecido por el Gobierno Estatal, e insisten en que dicho encuentro debe ser encabezado por la gobernadora, Evelyn Salgado Pineda.
Por parte del Estado, sólo se ha informado de tres elementos de la Policía del Estado puestos a disposición, mientras que las investigaciones han sido atraídas por la Fiscalía General de la República (FGR).